lunes, 19 de mayo de 2008

Empresarios preocupados por Venezuela



COMERCIO EXTERIOR





El sector colombiano se preocupa por las repercusiones que tendrían las declaraciones de Chávez de someterá a "profunda revisión" la economía entre los dos países.
El presidente de la federación de cámaras de empresas del estado fronterizo del Táchira, José Rozo, dijo el viernes a la AP que los empresarios se mantendrán "alertas" ante el riesgo de que se repita una situación similar a la de marzo, cuando el intercambio comercial se paralizó por casi una semana a consecuencia de una crisis diplomática. El mandatario hizo el anuncio de revisión el jueves, horas después que la Interpol difundió un estudio que descartó la manipulación de los archivos que estaban en unas computadoras que le fueron decomisadas a las FARC. Algunos de los documentos incautados señalan la existe de vínculos entre Chávez y el grupo rebelde. Rozo denunció que desde hace dos meses el gobierno venezolano impuso una serie de "trabas burocráticas" a las exportaciones hacia Colombia que han limitado el flujo de las mercancías y han originado el cierre de algunas exportadoras y empresas de transporte locales. Según cálculos oficiales, el intercambio comercial entre Venezuela y Colombia cerró el año pasado en 6.200 millones de dólares. Chávez dijo en la víspera que la revisión de las relaciones podría implicar la sustitución de los productos que se exportan desde Colombia. El presidente de la comisión de asuntos fronterizos de la Federación de Cámaras de Empresarios de Venezuela (Fedecámaras), Isidoro Teres, señaló que en este momento el país no está en condiciones de reemplazar las importaciones debido a la fuerte dependencia que mantiene del país vecino. Indicó que una buena porción de las importaciones desde Colombia está constituida por alimentos tales como pollo, huevos, carne, leche y enlatados, que son muy importantes para el mercado venezolano. "Con la situación de insuficiencia de producción de alimentos que hay por el aumento de la demanda mundial, no se le puede llegar de un día para otro a un tercer país y hacerle un pedido. De modo que lo que se trae de Colombia se seguirá trayendo ", acotó el dirigente. La aparición de nuevos documentos, que Bogotá sostiene que fueron extraídos del computador de un extinto jefe rebelde y que señalan la existencia de vínculos entre el gobierno de Chávez y las FARC, desataron una nueva crisis entre los gobiernos de Colombia y Venezuela. Chávez fustigó el jueves duramente a su colega colombiano, Alvaro Uribe, por la difusión del estudio de la Interpol, y consideró el hecho como una "agresión" a su gobierno. En marzo pasado las tensiones entre los dos países se agitaron por el ataque que realizaron militares colombianos a un campamento de las FARC, que estaba en territorio ecuatoriano, donde murió uno de los jefes del grupo, Raúl Reyes. En esa oportunidad el impasse fue superada gracias a la mediación de varios gobernantes latinoamericanos.

EXITO EMPRESARIAL

Qué debemos tener en cuenta para conseguir un Éxito Empresarial Sostenido y Creciente

Los procesos que llevan al éxito creciente y sostenido de empresas y "emprendimientos", son múltiples y diversos. Pero, como señalamos en otros trabajos y reflexiones, estos procesos tienen que ser convergentes y, al mismo tiempo, visionarios, ordenados y sistemáticos.
Cuentas ordenadas y sistemáticamente llevadas es un requisito esencial; pero, sin visión, esos esfuerzos se agotan prontamente; y, lamentablemente, no tienen vuelo. Como dice el viejo dicho latino "Pedes in terra ad Sidera visus." Esto es, con los pies en la tierra y la mirada en el cielo.
Los pies en la tierra son las cuentas ordenadas y sistemáticamente llevadas, La mirada en el cielo, es la visión, única responsable, y prometedora fuente de creatividad, anticipación y capacidad, para ir y viajar más allá de los estrechos límites de la rutina diaria y consuetudinaria que, con visión tanta falta hace. Pero que, sin esta última, tan poca sostenibilidad y belleza da a nuestros esfuerzos de cualquier naturaleza.
En el seno de las empresas y "emprendimientos", los procesos que garantizan sus éxitos crecientes y sostenidos, requieren de "servo" mecanismos, suficientemente plásticos y ágiles como para anticipar y satisfacer demandas cada vez más rápidamente y mejor que los demás en la competencia, adaptando, para tal fin, toda las estructuras y procedimientos internos, con la misma agilidad y plasticidad; y, tal vez, procurando y logrando una sinergia cada vez más rica y efectiva con esos mismos competidores en el mercado.
Ahora bien, en este marco, nos preguntamos ¿cómo desarrollamos efectivamente nuestra visión, y en qué factores claves de nuestras empresas y emprendimientos, concentramos esas visiones?
Pues bien, primero, veamos ¿cómo podemos desarrollar efectivamente nuestra visión.? Tenemos que, en primer lugar, mirar siempre al mundo que nos rodea, sin preconcepciones y sin juicios de valores, tal como si lo viéramos por primera vez. Todos en el medio que nos rodea pueden ser nuestros mejores clientes. Pero, sobre todo, nuestros mejores clientes son, sin duda, los clientes que ya tenemos. Los clientes que ya tenemos, son nuestro principal activo. Son las joyas más preciadas de cualquier "emprendimiento" o empresa.
Nuestros empleados, los que ya tenemos son también y antes que los anteriores, más que nuestros empleados, nuestros mejores clientes potenciales y actuales. Son a ellos como a los anteriores a los que, en primer lugar, tenemos que cultivarlos. Todos ellos son, en conjunto, nuestra principal fuente de ingreso. Y, al mismo tiempo, nuestra principal limitación. Es a nosotros y a ellos mismos la responsabilidad de que, en conjunto, formemos equipos; y, trascendiendo relaciones empleado / patrón o empresarios / clientes, en conjunto nos constituyamos en asociados, y cuando más estrecha y sinérgicamente asociados mejor.
De igual forma, tenemos que ver a nuestros proveedores y empresarios tercerizantes de cualquier servicio.
A todos ellos: clientes externos, empleados o clientes internos, proveedores o interlocutores de cualquier naturaleza, no tenemos que etiquetarlos. Etiquetar anticipadamente a nuestros clientes o asociados como buenos o malos, como frecuentes o no frecuentes, como simpáticos o antipáticos, como rentables o no rentables, como caros o baratos, como fáciles o incómodos, en fin, como deseables o no deseables, nos pone una barrera, antes de haber comenzado. Nuestra actitud hacia fuera y dentro de nuestros "emprendimientos" y empresas tiene que ser, en este sentido, inocente y desprejuiciada.
Todos nuestros asociados son igualmente buenos y necesarios. Ninguno es malo o inconveniente antes de haberlo así demostrado. E, incluso después de haberlo demostrado, es posible que, haciendo lo que tenemos que hacer, ese asociado, en cualquier papel, quien ha demostrado ser inconveniente, pueda transformarse en bueno o conveniente, e incluso en uno de nuestros mejores clientes, empleados, proveedores, socios o lo que sea.
Esta actitud mental de "inocencia" o de "apertura," incondicionada, pero no negligente, es nuestro principal aliado para desarrollar la visión que como empresarios y emprendedores necesitamos para que, nuestros procesos, ordenados y llevados sistemáticamente, en efecto den sus frutos, en términos de rentabilidad; y, por supuesto, en términos de nuestro desarrollo empresarial competitivo, creciente y auto-sostenido.
Lo anterior es tal vez la actitud primera que tenemos que adoptar para desarrollar una verdadera visión que dé alas a nuestros esfuerzos empresariales sistemáticos. En ¿qué factores claves tenemos que concentrarnos?.Esa era la segunda parte de la pregunta más arriba. La respuesta correspondiente, ya la dimos. Tenemos que concentrarnos en nuestros clientes más inmediatos. Tenemos que visualizar a nuestros clientes en una serie de círculos concéntricos. En el primero están nuestros clientes internos, nuestros empleados. En el segundo, están los clientes que ya están en nuestra cartera. En el tercero, están los que tal vez tengan algún interés, ya identificado o inferido con nuestros productos o servicios. Y en los círculos sucesivos, la masa de población, no segmentada, entre los cuáles pueden o no haber clientes potenciales.
Nosotros tenemos que concentrarnos en ese orden. Nuestros mayores esfuerzos y recursos tienen que destinarse a la población en el primero de los círculos, y, en orden decreciente, en cada uno de los demás. Las expectativas de retorno, lo cual hay que confirmar, están proporcionalmente en el mismo orden. Podemos esperar una mayor rentabilidad relativa de nuestras inversiones, de nuestros esfuerzos y, sobre todo, de nuestro compromiso y sincero apasionamiento, con la población en el primero de los círculos y así sucesivamente y en orden decreciente respecto a las poblaciones en los demás círculos.
Es probable que si ordenamos a los "emprendimientos" y empresas de cualquier lugar del mundo, sector o región por la forma en que distribuyen sus recursos y sus "apasionamientos", "compromisos", "amores" o simplemente respeto entre estas poblaciones, nos encontraremos con que aquellas que son congruentes en el sentido arriba sugerido, son, proporcional y equivalentemente, más exitosas y consolidadas que las demás.
Con esta actitud de visión y sistematicidad debidamente aunadas e inextricablemente estrechas, los emprendedores y empresarios, pueden en efecto hacer grandes transformaciones y, sobre todo, transformaciones oportunas y anticipatorias de las demandas del medio que los rodea.
En otro trabajo, señalamos la importancia crucial de la integración del medio externo, del mercado, de la comunidad, dentro mismo del seno de las empresas o "emprendimientos", como condición, sine qua non, para que la empresa tenga éxito. En esta reflexión, sin para nada desmerecer este requisito, agregamos este componente o énfasis adicional. Esto es, la necesidad de "mirar al mundo sin etiquetas," desprejuiciadamente, con una actitud siempre experimentadora. Y, sobre todo, con la disposición y capacidad y el compromiso y "enamoramiento" necesario, para ir descubriendo, sin reticencias, y siempre dispuestos a realizar las transformaciones que la realidad y las viabilidades del momento lo permitan.
Al fin y al cabo, el éxito empresarial creciente y sostenido, es siempre función de la capacidad empresarial para identificar y realizar oportuna, adecuada, eficiente y rentablemente, las oportunidades del momento; y para, en ese proceso, siempre aumentar y aprovechar cada vez mejor nuestras potencialidades. Y, ¿por qué no decirlo?. Esto es necesario para siempre mejorarnos a nosotros mismos, y mejor realizar nuestra concomitante capacidad para, naturalmente, transformar nuestras debilidades en fortalezas, nuestros desafíos en oportunidades realizadas efectivamente; y, a todo ese conjunto, en ventajas comparativas apreciadas, buscadas y, por supuesto, bien recompensadas.